Se trata de un tratamiento prácticamente indoloro sin necesidad de aplicar anestesia. El paciente puede notar una ligera molestia en la zona donde se realiza la infiltración totalmente tolerable.

Depende de las características del paciente.

2-3 sesiones en intervalos de 3 meses.

Antes de realizar el tratamiento es importante saber que el paciente deberá presentar una piel sana sin quemaduras o lesiones activas. Posteriormente se recomienda evitar la exposición al sol y altas temperaturas durante las primeras 48-72h, y es indispensable el uso de fotoprotector solar diario durante el mes posterior, además de mantener la piel hidratada y seguir las recomendaciones establecidas por nuestro equipo médico.